4 de noviembre de 2008

Un poco de historia

Lev Yashín nació en Moscú el 2 de octubre de 1929. A los 18 años, trabajó en una fábrica de aviones como mecánico especializado. Practicaba un deporte muy difundido en Rusia, el hockey sobre hielo, y su puesto era el de arquero. En la práctica intensa afinó la capacidad de sus reflejos.
En 1947, se produjo su traslado al fútbol por una circunstancia especial: el equipo de la fábrica en donde laboraba no podía contar con su arquero titular para un partido muy importante. El entrenador pidió a Yashín que actuara en ese sitio. Había observado sus manos grandes, bien formadas.
Dos años después se incorporó al Dynamo de Moscú y debió esperar una oportunidad pues el titular era "Tiger" Khomich, quien deslumbró a Europa en una gira que realizó el equipo en 1945. En la temporada 1952-1953 Yashín se erigió en dueño absoluto del pórtico y, en un par de partidos, en el futbolista más popular de su país.
Culminado el torneo, el Dynamo salió de gira por Europa. Ahí comenzó la proyección internacional de Lev, que creció cuando la Unión Soviética intervino en el Mundial de 1958, en Suecia. Debutó en Gotemburgo, en el empate 2 por 2 frente a Inglaterra. Kevan y Finney, de penal, fueron los primeros en batir a Yashín.
El 10 de julio de 1960, en el "Parque de los Príncipes", de París, la Unión Soviética enfrentó a Yugoslavia en la final de la Primera Copa Europea de las Naciones. Yashín cumplió una actuación poco menos que sensacional, fue la figura del partido y su equipo conquistó el título.
Mundialista en los torneos de 1962 en Chile y en 1966 en Inglaterra, olímpico en los Juegos de Melbourne, asombró en todas partes por su temeridad increíble, su valor para resolver situaciones peligrosas, sus reflejos y enorme seguridad. Fue apodado "la Araña Negra" por su indumentaria de ese color.
En verano jugaba al basquetbol para mantenerse ágil. En invierno continuaba con la práctica del hockey sobre hielo y era un apasionado por la pesca. Gustaba del cine, la lectura y la música ligera. No ingería licor alguno y fumaba una decena diaria de cigarrillos.
Luego de 25 años de titularidad en el Dynamo y con 71 defensas del arco de la Unión Soviética, se retiró del fútbol en mayo de 1971. Se despidió con la distinción de haber sido el hombre más condecorado de su país.

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